Sumérgete en un viaje fascinante a través del tiempo y descubre los misterios que se esconden detrás de los exquisitos tejidos andinos de Chinchero. En esta región de maravillas ubicada en el corazón de los Andes peruanos, el arte textil se convierte en una expresión de tradición, destreza y una conexión profunda con la naturaleza.
Comienzo
En Fiandina, nos enorgullece honrar y preservar esta tradición, compartiendo la pasión y el amor que las artesanas peruanas han tejido con cada hebra, y llevando un pedazo del corazón de Chinchero a cada rincón del mundo.
Todo comienza con la obtención de la lana, proveniente de nobles criaturas andinas como las ovejas, llamas y alpacas. Siguiendo una tradición centenaria, esta lana se somete a un proceso meticuloso de lavado utilizando agua tibia y una planta llamada "saqta", que actúa como un detergente natural. En tazones de arcilla, este ritual se desarrolla, respetando las costumbres ancestrales que han pasado de generación en generación.
Hilado
El hilado es una verdadera obra de arte en sí misma, donde la destreza de las artesanas se despliega a medida que utilizan una rueca sencilla llamada "pushca", transformando la lana en hilos finos y resistentes. Un proceso que conecta manos expertas y crea una unión especial con cada hebra.
Teñido
Pero la verdadera magia reside en el teñido.
Chinchero se erige como uno de los pocos lugares en el mundo capaz de lograr una paleta casi infinita de tonalidades utilizando únicamente tintes naturales. Plantas exóticas como el kimsak’uchu, la flor de retama y el kinsa kucho se convierten en las fuentes de pigmentos vibrantes, que dan vida a colores como el azul, el amarillo, el verde y el rojo. Y aquí, el conocimiento ancestral cobra vida de una manera asombrosa: para asegurar que los tintes se adhieran a la tela, se emplea la orina de niños menores de 2 años, una técnica que trasciende el tiempo y resalta la conexión entre la tradición y la naturaleza.
Lana
Finalmente, los hilos tejidos con amor y habilidad se convierten en ovillos de lana que se insertan en los telares. Es en este momento cuando se desencadena uno de los sucesos más asombrosos de la ciudad del Arco Iris, como se conoce a Chinchero. La danza de colores y patrones comienza a cobrar vida en cada trama y urdimbre, tejiendo historias y tradiciones que han resistido el paso de los siglos.
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